Entre ayer y hoy leí un texto sobre la masacre de Katyn, y me llamó la atención como en numerosas ocasiones tenemos tan poca conciencia sobre lo que ha pasado en este mundo y lo peor es que como con frecuencia nos olvidamos de que nuestro pasado es nuestra memoria colectiva y aún así no le hacemos caso y olvidamos nuestros errores.
Quizá muchos de ustedes no sepan que fue la masacre de Katyn, como tampoco yo lo sabía, ahí les va un pequeño resumen:
En 1940 las tropas rusas entraron en polonia y tomaron presos a 25,000 militares los cuales fueron de diversos campos en la antigua URSS, para posteriormente, 15,000 de ellos ser transportados a la región de Katyn, donde fueron asesinados y enterrados.
Cuando más tarde, Polonia se alió con Rusia, exigió la devolución de los presos de los cuales regresaron sólo 10,000 y que no sabían lo que les había sucedido al resto.
Mas tarde alemania (en el 43) encontró las fosas donde estaban los cuerpos y lo anunciaron (evidentemente con la intención de resquebrajar la unidad de los aliados), sin embargo por cuestiones políticas se silenció el hecho y poco después se proclamó que habían sido los mismos nazis quienes habían realizado los asesinatos.
Tecnicamente ahí termina esa parte de la historia, pero a mi parecer lo más terrible es lo que pasó después de esos asesinatos (sé que es extraño que diga esto, porque no hay nada más valioso que la vida, sin embargo cuando esa vida se ve empañada por mentiras es aún más terrible).
Con la llegada de Gorbachov al gobierno se inició una termporada de apertura en cuanto a los crímenes de guerra y se empezó a dar información sobre el caso, posteriormente, incluso se otorgó a Polonia la orden firmada de dichos asesinatos por Stalin y 5 personas más del politburo, y junto con ella la promesa de la búsqueda de los culpables materiales y su juicio si aún estaban vivos, sin embargo actualmente el gobierno ruso a adoptado de nuevo una postura cerrada al respecto y ha vuelto a mencionar que fueron los nazis (cosa harto complicada de defender dado que está la orden firmada) y que en el mejor de los casos eso no podía ser considerado un crímen de guerra, si no un crímen común que ya había expirado.
El caso me pareció indignante y me hizo reflexionar sobre nuestra capacidad para olvidar el pasado, para dejar de reclamarlo, para no exigir justicia, y es que casos como este hay miles, y en nuestro país no se diga, por ejemplo, ¿alguien me puede dar razón de Acteal, de Aguas Blancas, del 68?
¿Por qué nos cuesta tanto reconocer nuestros errores, es que acaso no nos hemos dado cuenta de que si no sanamos nuestras heridas previas estas van a seguir sangrando y generando dolor?, ¿no nos hemos percatado de la importancia de reconocer nuestros errores como personas, países, humanidad para poder seguir adelante aprendiendo de ellos?
Hagamos memoria, recordemos y busquemos la justicia, es la única manera de avanzar sin seguir tropezando con nosotros mismos.