¿Por qué no quedarnos como estamos?

"Para los movimientos sociales y las organizaciones políticas que constituyen la base de otra relación de fuerza para realizar cambios sociales, los intelectuales no son creíbles si no están comprometidos, y no son útiles si no son críticos. Intelectuales no son solamente los que tienen un título universitario, sino todos los que pueden tomar una distancia de relfexión crítica frente a la realidad. Un intelectual que no se siente concernido por la suerte de la humanidad viene a ser un extraterrestre, o un cínico.
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El intelectual no es el íder, en cuanto intelectual -aunque alguna vez también puede ser un líder social o político-. Su papel específico es el de acompañar la acción social en su dimensión ideológica y teórica, un papel tan necesario como irremplazable. Es verdad que la teoría sin praxis desemboca en la esterilidad, pero la praxis sin teoría termina en el pragmatismo."

(Houtart, Francois.La teoría y el intelectual en la transformación social. Agenda Latinoamericana 2006.www.servicioskoinonia.org)

Aunque a veces no sepamos ni como, tenemos que generar utopías, utopías que siempre se muevan, que reconozcan la capacidad de cambio del ser humano, que busquen nuevas aproximaciones a la realidad, que no sean simplemente un paliativo, sino una respuesta real, tangible que vele por las necesidades de nuestros hemanos,en la que todos estemos dispuestos a ceder y a actuar, no nada más a quedarnos muy comodamente sentados detrás del monitor de una computadora especulando las razones del mal en el mundo; sino buscando alternativas de solución que sean viables,reales, que construyan una mejor sociedad en la cual participemos activamente y no como meros espectadores de la desgracia ajena y propia.